La práctica de proveer servicios de terapia de manera remota o virtual es algo que se ha venido desarrollando e implementando en mayor o menor grado durante los ultimos años.
Sin embargo, la pandemia del COVID-19 nos ha empujado a todos a una nueva realidad, en la que los servicios de teleterapia se han posicionado como la alternativa que permite dar continuidad a las intervenciones con pacientes y estudiantes bajo estrictas normas de distanciamiento social.
Para muchos profesionales que han venido ofreciendo sus servicios de manera presencial, este giro de 180 grados hacia una modalidad virtual significa un ajuste considerable a sus estrategias de planificación, su rol como terapista, su interacción con estudiantes/ familias y sin lugar a duda un cambio en su rutina.
Más allá de todos los nuevos retos que la normalización de la telepráctica significa, en este artículo queremos resaltar algunos de sus beneficios para ti como especialista.
1. Seguridad
La práctica de la teleterapia no implica ningún riesgo para ti como especialista, en terminos de tu salud y bienestar físico, ya que puedes ofrecer tus servicios desde el hogar o de forma remota, sin tener contacto directo con el estudiante, ni con la población que por lo general se encuentra en el ambiente o entorno escolar o del centro.
Sabemos que estos son lugares con un alto volumen de personas, entre estudiantes, maestros, padres, empleados y visitantes. Ofreciendo nuestros servicios desde casa limitamos este contacto.
Durante tiempos de pandemia las medidas de distanciamiento serán más estrictas que en tiempos de normalidad. Esto quiere decir que podrías considerar la teleterapia como parte de tu prática clínica más allá de una modalidad esclusiva para tiempos de pandemia, lo que nos lleva al siguiente beneficio para ti.
2. Flexibilidad
La teleterapia te permite variar la modalidad del servicio que ofreces a tus estudiantes, de acuerdo al caso, entre un servicio presencial y unas sesiones de intervención remotas. Podrías desarrollar entonces una práctica híbrida.
Esto te dará más flexibilidad a ti como profesional clínico, ya que podrás ofrecer tu servicio desde el hogar o de forma remota, ahorrando tiempo en tu vehículo e inversión en gasolina.
Adicional a la flexibilidad inherente a la categoría de servicios profesionales, y al control que tienes sobre tu horario y tu carga de trabajo como contratista independiente, el poder trabajar de forma remota, o ofrecerle esa opción a tus estudiantes/pacientes, es una manera de optimizar tu tiempo, incorporar una nueva dimensión a tu servicio y posiblemente servir a estudiantes a los que tendrías menor o ningún acceso.
3. Oportunidades
El uso de la tecnología es una de las oportunidades más grandes y valiosas que nos presenta un servicio de teleterapia.
Nuestros estudientes/pacientes se pueden beneficiar de una intervención interactiva mediante el uso de aplicaciones y otras herramientas y materiales digitales, pero como especialista, la tecnología te abre a ti también un mundo de posibilidades.
Ya no estarás limitado al papel para utilizar imagenes o ilustraciones coloridas y variadas. Podrás incluir material audiovisual como grabaciones de sonidos, videos y cuentos digitalizados y anímados.
Tendrás acceso a un mundo de información y de la misma forma tendrán acceso tus estudiantes, a quienes podrás guiar en el proceso de busqueda, exploración e interacción con la tecnología para el alcance de sus metas académicas. (Hablaremos más sobre acceso en un próximo punto)
4. Comunicación
La teleterapia te ofrece nuevos canales y mecanismos de comunicación con tus estudiantes/pacientes y con sus padres/familias.
El proceso de la teleterapia es uno que involucra más a los padres o encargados. Veamos esto como algo positivo para el estudiante. Como aliados en el proceso debemos orientarlos sobre sus respectivos roles y las maneras en las que nos pueden asistir desde el hogar.
Esto sólo se logrará fomentando y cultivando nuestra comunicación consistente y efectiva con los padres o encargados, orientandoles y aclarando sus preguntas, proveyendoles estrategias y reconociendo su propio esfuerzo y contribución.
5. Acceso
Mencionamos el acceso que tenemos a nuestros estudiantes/pacientes como una oportunidad de la modalidad de teleterapia.
Sabemos que este es un punto controvertible, ya que lamentablemente, y a pesar de los esfuerzos que se realicen a nivel gubernamental, muchos de nuestros estudiantes no tendrán acceso óptimo a los equipos y tecnología que necesitan para poder participar en una sesión de teleterapia.
Por esa razón, cuando hablamos de “acceso” como un beneficio para el especialista, nos referimos no sólo al acceso que podemos tener a los estudiantes/pacientes y familias que si tienen las herramientas necesarias, sino también acceso a:
- información y recursos que podemos utilizar para hacer nuestras intervenciones más dinámicas y efectivas.
- una variedad de plataformas desde donde podemos interactuar con nuestros estudiantes y ofrecerles una experiencia diferente.
- educación continua dentro y fuera de los límites de nuestra localidad o área geográfica.
Esperamos que esta breve reflexión sobre 5 beneficios de la teleterapia para el especialista continuen motivandote a implementar la teleterapia como otra dimensión de tu práctica profesional.
Comparte con nosotros tus dudas, preguntas o recientes experiencias relacionadas al ofrecimiento de servicios a través de la telepráctica. ¡Deja tu comentario bajo este artículo!